Toque
Hacía años que tenía este restaurante en mi lista de pendientes para ir y por fin he podido y la verdad que ha superado sus expectativas.
Se encuentra en Majadahonda con una terraza grande y un amplio comedor que invita a empezar desde la hora del aperitivo, quedarte a comer y terminar con una copita en la terraza.
La carta no es muy grande pero lo prefiero porque te entran ganas de pedirte de todo. Otra cosa positiva es que ofrecen muchas medias raciones, por lo que te da la opción de poder probar más cosas.
Sándwich de solomillo de vaca, cremoso de setas, queso comté y parmesano. El primero de todos y el mejor.
Buñuelo de cabrales. Un espectáculo de buñuelos que se me deshacía en la boca.
Gilda clásica con salpicón de marisco. Una gilda con un "toque" distinto que me comería 4 seguidas.
Focaccia de atún rojo. Una delicia de bocado que no puedes no pedirla.
Croqueta de jamón ibérico. Cremosa y con mucho sabor. Me encantó.











Comentarios
Publicar un comentario