Red project Sushi

Red Project es un restaurante que acaba de abrir sus puertas en Madrid. Con apenas dos meses, este restaurante nos ha conquistado y ha conseguido unos clientes habituales.

Ya solo con la entrada puedes ver que no se parece en nada a lo que estamos acostumbrados. La entrada es una sala con un dinosaurio iluminado. Tras esto, abres la puerta y bajas las escaleras, con todo iluminado de rojo, el color predominante en Asia y ves todas las salas llenas de bóvedas.

Cuenta con varias salas, para tomar un cocktail o algo antes de cenar y luego varias salas para la comida. Todo con el mismo ambiente, realzando la infraestructura que tienen y con decoración que, mires donde mires, es muy original.

El servicio se comportó de escándalo. Estaban súper atentos a todas las mesas, recomendando genial (de hecho, nosotros pedimos todo recomendado, no elegimos nada) y explicando cada plato perfectamente y el maridaje. Hacía tiempo que no estábamos tan cómodos en un restaurante y hablando con todo el equipo que nos habría encantado tomarnos una copa con ellos.

Sin duda volveremos a este restaurante, porque aunque la comida está muy bien, no es lo único que se debe tener en cuenta cuando vas a cenar. Y este sitio cumplía todos los aspectos para ser una cena que no olvidaremos.

- Conjunto: 4,5/5
- Precio/ calidad: 4,5/5
- Calidad/ producto: 4/5
- Lugar/ decoración: 4,5/5
- Servicio: 5/5

Crispy rice atun redspicy. Para empezar la cena unos nigiris con el arroz crujiente y tartar de atún picante. Con bastante sabor y venían acompañados de guacamole, dándole así un toque diferente.


Sashimi mixto de 9 cortes (atún, salmón y lubina). Un plato aparentemente sencillo, pero que como no hagan bien el corte o el producto no sea de buena calidad, no vale nada. En este caso, estaba genial.


Nigiri de langostino con su reducción. También estaba muy rico.


Nigiri de o toro con foie flambeado. Empezamos por este nigiri y fue el que más me gusto. El toro estaba buenísimo y flambeado que, junto con el toque del foie, explotaba en la boca.


Nigiri de hamachi yuzukosho. Otro obligatorio de aquí. El arroz lo hacen muy bien en todos los nigiris, pero éste me encantó.


Elverroll. Relleno de kanikama y aguacate. Envuelto en tanuki especial triturado y mayojapo, salsa spicy rock shrimp. Cuando os digo que este restaurante me ha conquistado es por algo… Ahora, todos los restaurantes ponen los langostinos con la salsa picante como entrante. Pues, ¿qué hacen aquí? Le dan un vuelco a la idea y crean un rollo delicioso que todos querréis pedir porque está para chuparse los dedos.


Nigiri de foie brulee con manzana caramelizada. No somos mucho de este tipo de nigiris, pero nos aconsejaron que lo pidiésemos porque nos iba a encantar y tenían toda la razón. Es muy distinto y así se sale de la monotonía.



Para acompañar la comida, nos pusieron distintos tipos de sake de más seco a más afrutado, acompañando a cada nigiri junto con la explicación de cada uno. Nunca antes había visto un maridaje de sake, siendo esto un grandísimo punto a favor de este restaurante que apuesta por intentar aportar cosas nuevas al comensal.


Tacos de rib eye y teriyaki. Para que no todo fuese puro japo, pedimos estos tacos que estaban exquisitos. El plato es contundente por lo que, si lo pedís, no pidáis tanta cantidad como nosotros que nos tuvimos que llevar a casa de lo que sobró.


Mochis de mango y de fresa. Los mochis, o te encantan o los odias. En mi caso, me encantan y el de mango es de mis favoritos, por lo que era un acierto seguro. Por otro lado, el de fresa me sorprendió mucho porque su sabor me recordaba a los petit-suisse que me flipan.


Fotos del lugar:







Comentarios

Entradas populares