Zalacaín

Un clásico de Madrid que no puede faltar en vuestra lista de restaurantes que visitar en Madrid al menos una vez en la vida.

Este restaurante se merece un 10 en todas las categorías ya que cuidan a la perfección cada detalle para que la comida sea toda una experiencia y no pueda faltarte de nada.

El local se encuentra en la zona del Viso y hay que ir con chaqueta. Os recomiendo que os toméis un cocktail para abrir el apetito antes de sentaros a la mesa y os dejéis aconsejar, ya que pueden hacer lo que pidas en función de tus gustos.

El servicio es excelente, aunque te lo esperas de un restaurante así, siempre es bueno decirlo, ya que hay algunos sitios donde el servicio no acompaña al resto de cosas.

Lo bueno de este restaurante es que puedes pedir mitades de la mayoría de los platos, pudiendo así probar más o compartir 3-4 platos entre dos. 

- Conjunto: 5/5
- Precio/ calidad: 5/5
- Calidad/ producto: 5/5
- Lugar/ decoración: 5/5
- Servicio: 5/5

Steak tartar de solomillo. Os digo sinceramente que es el mejor Steak que he probado en mi vida. En el vídeo podéis ver cómo lo van preparando y el resultado final que es para llorar con cad abocado.

Patatas soufflé. Acompañamiento de todas las carnes y están buenísimas. Pocos restaurantes las tienen debido a la complejidad de freírlas. 

Croquetas y aperitivos de la casa. Riquísimas y super cremosas, para tomarte todo el plato tú solo.

Lasaña de hongos y foie gratinada al champagne. La pedimos para el centro y voló. Es un obligatorio de la casa o los raviolis, son platos que tenéis que probar.

Huevo escalfado con crema de alcachofas, chips y setas. Muy bueno también, pero me quedo con los otros platos.

Bacalao Tellagorri. Para que no fuese todo carne, pedimos también el bacalao y estaba para chuparse los dedos. 

Solomillo Wellington con crema de granada y salsa cinco pimientas. De los mejores solomillos que podréis probar en Madrid. Está delicioso, perfectamente hecho y nada pesado al pedir una mitad.

Guisantes. Con ese verde intenso que llama la atención. Muy ricos.

Cocktail gin sour. Pedimos uno distinto con cítricos y ginebra et voila.

Whiskey sour. Cada vez que he ido lo he pedido ya que fue donde lo descubrí y me encanta.

Canutillos de chocolate con mascarpone y helado de chocolate blanco. Sinceramente, no tenía mucha fe en el postre, pero me gustó mucho y nada pesado.

Café shakeado. Nunca lo habían hecho, pero fue tan sencillo como llamar al barman y lo hizo en un momento.

Frambuesas. Con muchísimo sabor. 

Trufas por cortesía de la casa. Estupendas para terminar una cena de 10.

Tejas de la casa deliciosas. 

Fotos del lugar: